lunes, 6 de abril de 2015

Calidad de Vida o Vida de Calidad

Tener muchas comodidades, cuenta bancaria con buen saldo, un buen carro, la casa soñada, ser profesional, una familia, hijos en excelentes escuelas o universidades, vacaciones en el extranjero son algunas de las cosas con las cuales muchas personas asocian una excelente calidad de vida. Sin embargo, alcanzar todo lo anterior hace que nuestra vida de calidad  disminuya, pues eso acarrea cansancio, enfermedades, desgaste, estrés entre otras tantas cosas. La calidad de vida y la vida de calidad no siempre van de la mano. Ojalá nos diéramos cuenta de lo importante de lo segundo y cómo hasta por arte de magia llega lo primero. Casi nunca es al revés.
Por Eleonora Zuleta Patiño (“>)


Desde mi punto de vista calidad de vida  y vida de calidad, son términos que aún nos falta mucho por desarrollar. 

Con el transcurrir de los años, me he percatado que las personas viven corriendo tras una serie de elementos a fin de mejorar su vida, buscando para ello un sin fin de objetivos, la mayoría externos, haciendo que sus vidas se vuelvan un constante corre-corre, donde cuando ya pareces que lo alcanzas, te das cuenta que debes empezar de nuevo pues te percatas que hay algo mejor a lo que tienes. 

Unas pocas lineas sobre la calidad de vida
La calidad de vida muchas veces viene marcada por el entorno social: el carro, la casa, el lugar donde vives o estudias, tu puesto de trabajo, tu círculo de amigos (mientras más exclusivo, mejor), el lugar de tus más recientes vacaciones (me molesta el término "tus ultimas vacaciones, como si hubiesen mas), el lugar donde compras, incluso hasta la marca de ropa que usas, el médico y clínica donde te atienden y un largo etcétera. 

Si bien es cierto que buscar superarse es un acto humano, no siempre nos lleva a la mejor elección para vivir. El afán por obtener o tener lo mejor de todo, nos está llevando a una debacle emocional, física y espiritual que, sin quererlo, está impidiendo disfrutar con calidad, esas cosas que hemos obtenido. 

Conozco muchas personas que tienen todo para estar bien: casa en una buena zona residencial, carro modelo reciente, un buen teléfono, sus vacaciones en el extranjero, ganan buen dinero. Pero son personas con problemas de salud muy evidentes, como por ejemplo sobre peso, o menos evidentes como problemas de tensión, de corazón, pulmonares, estomacales. Sin hablar o mencionar las emotivas  como por ejemplo tristeza, depresión, sensación de soledad, mal humor, falta de o problemas con la pareja, problemas de comunicación, desánimo; y las mentales como por ejemplo agotamiento, paranoia, pánico, desmotivación... ¿contradictorio, verdad?

Unas líneas sobre vida de calidad

También he conocido otro grupo de personas que sin tener casi nada de lo anterior, materialmente hablando, y que viven en una zona popular o clase media, que estudian en colegios o universidades públicas, quizá solo han ido de vacaciones donde su familia en otro estado del país, tienen un carro algo viejo pero en buen estado  son personas muy sanas, alegres, motivadas, relativamente más sanos física, mental y emocionalmente hablando. 
Claro hay sus excepciones en ambos casos

La calidad de vida viene sujeta a objetos, cosas, estatus. 
La vida de calidad viene sujeta a instantes, personas, emociones positivas.


En las terapias, se acercan personas que presentan un sinfín de trabas emocionales relacionadas al "tener" y que están entorpeciendo su "ser". Por ejemplo, lo primero que me preguntan es"¿debo traer ropa especial? ¿es indispensable la manta o mat? ¿requiero de algún tipo de zapato específico?
Luego de unas cuantas terapias, se dan cuenta que: pueden estar bien sentados en el suelo, que pueden ser alegres con cualquier tipo de ropa o calzado, que pueden compartir con otros en un lugar sin aire acondicionado. 
Es durante la terapia que descubren el regalo de la vida de calidad, al agradecer, compartir, bendecir lo que se tiene y lo que no se tiene también. 
La carrera por tener lo mejor nos está impidiendo ser lo mejor que podemos ser.

Algunos Tips:  

  • Agradece lo que tienes
  • Comparte con personas que sean agradecidas, positivas, alegres y entusiastas.
  • Vive en el presente
  • Pasa más tiempo con las personas que amas: pareja, padres, hijos, familia, amigos cercanos. 
  • Intenta dejar de comprar lo más nuevo o de moda y dale el valor a lo que tienes. Descubre todas las cosas que posee (sobre todo si hablamos de los nuevos celulares)
  • Comparte un café o un pedazo de torta (pastel) con más frecuencia con tus amigos y pásales menos mensajes con fotos de ello.
  • Regálate unas vacaciones en familia en un lugar menos costoso pero por más tiempo. Intenta actividades gratuitas.
  • Piensa en cosas positivas

La vida es muy corta como para andar corriendo tras la calidad de las cosas. Dale valor a tu vida imprimiéndole calidad a lo que tienes. En ningún momento se trata de ser conformista, se trata de ser agradecido con la vida.
Es así como en realidad empiezas a disfrutar de la vida, de tu entorno, de todo. Aquí y ahora te permite darte una vida de calidad que más temprano que tarde redundará en una calidad de vida. Casi nunca es al revés.

Nos leemos en una próxima entrega

(“>) Eleonora Zuleta Patiño
    Hija de Dios. Mujer. Aprendiz de la Vida.
     Fundadora de Reír es Vivir
    Maestra Practicante en Bienestar y Alegría
    Miembro Experto del Consejo Universidad Virtual de la Risa (LOU) 
    Maestra Avanzada Practicante en Yoga de la Risa.
    Profesora de Yoga para Niños  y Familias
    Facilitadora Internacional en Manejo de Grupos
    Licenciada Comunicación Social
   Técnico en Publicidad