lunes, 24 de junio de 2013

En seis sesiones se nota el cambio

Desde que comencé en 2011 con esta actividad me di cuenta que las sesiones de Bienestar, Alegría y Yoga de la Risa son una terapia integral. En ellas, además del cuerpo, le das bienestar a tu mente, tu actitud y a tus emociones. Pero deben ser terapias continuas para ver y lograr cambios. ¿Cuántas sesiones? Al menos seis es lo que me dicta la experiencia.
Por Eleonora Zuleta Patiño (">)


Muchas personas piensan que lo que realizamos es simplemente hacer reír.
Nada más alejado de la realidad. Si bien la risa es un medio, nuestra meta es el bienestar integral de cada persona que asiste a las sesiones terapéuticas de Bienestar, Alegría y Yoga de la Risa. Las sesiones están pensadas para hacer ejercicios físicos, ejercicios de respiración profunda, gimnasia cerebral, programación neurolingüística y claro está una meditación guiada que nos conecta con nuestro ser interior.
Cada una es diferente y puede estar enfocada en un punto específico  de los anteriores. Es por esta razón, por la cual aquellas personas que asisten de manera regular, empiezan a notar cambios en si a partir de la sexta sesión, así sea semanal.
Los ejercicios físicos de bajo impacto logran crear más resistencia y capacidad motora, estos los logramos cantando, jugando, riendo, como los niños.
La risa y la respiración profunda nos brindan mayor nivel de oxígeno en nuestro organismo, permitiendo tener una sangre más enriquecida que nos nutre cada célula del cuerpo.
Cantar, jugar y hasta bailar de manera coordinada, nos fortalece el cerebro al permitir que ambos hemisferios trabajen conjunta pero divertidamente.
Las afirmaciones positivas, los abrazos, la aceptación del ser logra que cambiemos nuestra programación  de pensamientos y de actitud ante las circunstancias.
Cuando se realiza la meditación o relajación guiada, logramos conectarnos con nuestro interior, brindando un espacio de verdadera intimidad y conexión , incluso con el ser superior en el cual creamos.
La sensación que se obtiene al finalizar cada sesión es muy agradable y placentera. Y si bien una sola sesión puede brindarnos todo lo anterior. Lo recomendable es continuarlas por al menos seis sesiones.
Personas que ya tienen más de cuatro meses asistiendo a las sesiones semanales en el Parque, nos han reportado cambios importantes en sus vidas, como por ejemplo son más tolerantes, menos alterados, se sienten más vigorosos y con una mejor disposición ante las circunstancias.
Incluso han comentado que otras personas han notado sus cambios de actitud y físicos siendo el más común el comentario de verlos más radiantes y sanos.
Igual sucede en el caso empresarial. Muchas veces los encargados de recursos humanos nos solicitan una sola sesión pensando que eso es más que suficiente. Sin embargo, hemos comprobado que las empresas que han realizado al menos cuatro sesiones de forma periódica y sistemática, han reportado un incremento en la productividad, disminución del ausentismo laboral por estrés, mejores relaciones entre compañeros entre otros.
Nada cuesta con probar. Los invitamos a participar y luego nos cuentan.
Hasta una nueva entrega,



(“>) Eleonora Zuleta Patiño

Hija de Dios. Mujer. Aprendiz de la Vida.
Fundadora de Reír es Vivir
Maestra Practicante en Bienestar y Alegría.
Maestra Avanzada Practicante en Yoga de la Risa.
Facilitadora Internacional en Manejo de Grupos
Lic. Comunicación Social. Técnico en Publicidad