Cada vez que he dado un taller, siempre hay quienes preguntan si funcionan o no los datos que les damos y las herramientas que les ofrecemos. Indudablemente sí, siempre y cuando se usen adecuadamente y además, se practique lo enseñado. Este es el caso dos tareas asignadas en "El Bienestar se vive en RE mayor" y las experiencias vividas con relación a los tomates y las sonrisas.
Por Eleonora Zuleta Patiño (">)De tomates y sonrisas gira alrededor de dos preguntas surgidas en el taller mas reciente de "El Bienestar se vive en RE mayor", una de ellas formuladas por Helda, quien durante la conversación sobre el aquí, el ahora y la relajación activa, preguntó:
- Pero ¿es posible hacerlo en cualquier lugar y momento incluso la cocina?
La respuesta fue: - ¡sí, claro que sí!.
Ante su mirada atónita procedí a decirle que si alguna vez había llegado a percibir los olores de la comida cuando se está cocinando... las texturas... los colores... y de cómo los chefs en algunas oportunidades se detienen a "estar en la cocina". Más atónita todavía, Helda puso expresión de duda.
Sin embargo, en el grupo había una chef profesional la cual procedió a explicar la elaboración de los alimentos gourmet y el por qué del proceso.
Luego de esa maravillosa explicación les asigné de tarea tomar esa misma noche o tarde un tomate y percatarse de cada detalle, su forma, textura, color, olor y con él hacer una rica ensalada. Solo que ahora, prestando atención a cómo el cuchillo va cortando las rodajas, el sonido que emite, el olor que emana, la gota de agua que corre. En fin, estar presente mientras se corta el tomate.
Eso fue un martes. El sábado durante la sesión semanal en el Parque Negra Hipólita, le pregunté:
- Helda, ¿cómo te fue con el tomate?
Y con ojos brillantes de niña que descubre un juguete nuevo respondió:
-¡Maravillosa experiencia! Nunca me había percatado de todo lo que nos estamos perdiendo por no estar presentes, aquí y ahora.
Sonrisas para comenzar el día
Cuando conversamos sobre lo importante que es el reír en nuestras vidas, Lorena preguntó:
- Eleonora, ¿cómo puedo hacer para llenarme de alegría y risas desde temprano si vivo en un solo correr?
Mi respuesta fue:
-Muy sencillo, al despertar e incluso antes de levantarte, dibuja una sonrisa en tu rostro y estírate como un bebé. Así como seguramente lo hace Vale (su hija).
- ¿Será?, preguntó de nuevo.
- Inténtenlo. Lo máximo que puede suceder es que les cambie la actitud.
Y esa fue la segunda tarea.
Dos semanas más tarde Lorena me escribió a mi celular el siguiente mensaje:
- Te cuento que he hecho la tarea. Y me ha ido MUY BIEN (así lo puso en el mensaje) despertando con una gran sonrisa.
Luego conversando con ella, me corroboró la experiencia ampliando detalles como que con solo eso, ha logrado mejorar su estado de ánimo, las cosas fluyen mejor y disfruta más de la vida.
De tomates y sonrisas está llena la vida. Solo que a muchas veces nos dejamos influenciar por el entorno y nos perdemos de los grandes momentos que construyen nuestra vida. Y el Método de Bienestar, Alegría y Yoga de la Risa, es lo que ayuda a desarrollar en cada uno de nosotros.
Hasta una próxima entrega.
(“>) Eleonora Zuleta
Patiño
Hija de Dios. Mujer.
Aprendiz de la Vida.Fundadora de Reír es Vivir
Maestra Practicante en Bienestar y Alegría.
Maestra Avanzada Practicante en Yoga de la Risa.
Facilitadora Internacional en Manejo de Grupos
Licenciada Comunicación Social
Técnico en Publicidad.